Los dientes que se encuentran apiñados, torcidos y/o en mala posición son condiciones clínicas cada vez más comunes en los niños, en las etapas de crecimiento y desarrollo. Estas alteraciones de posición dental se asocian a diferentes causas:

  • Malos hábitos orales (Chupar dedo. Morder Objetos. etc)
  • Deficiencias en masticación por tendencia de hábitos alimenticios y dietas cada vez más blandas y liquidas.
  • Alteraciones Funcionales (Respiración oral, Interposición lingual, Interposición digital)
  • Alteraciones en la estructura maxilar (Maxilares más pequeños. más estrechos)
  • Alteraciones Dentales (Dientes grandes y/o pequeños, ausencia de dientes, dientes supernumerarios, herencia genética o tendencia familiar).

Estos aspectos generan una descompensación entre los maxilares y los dientes que van a erupcionar o ya están en boca, teniendo como resultado «la mal posición dental».

RECOMENDACIONES

Entre los 4 a los 6 años realizar una consulta preventiva con el especialista en Ortodoncia y Ortopedia Dento-maxilar, para establecer factores de riesgo y realizar un diagnóstico temprano de un posible apiñamiento o mal posición dental futura.

Realizar valoraciones periódicos cada 6 a 12 meses con el ortodoncista.

Si el paciente presenta condiciones que sugieren o están generando una mal posición dental, se debe colocar un aparato de Ortopedia Maxilar que estimule, corrija y elimine estas alteraciones de posición y la duración del tratamiento dependerá del grado de mal posición dental y varía entre 6 meses a l8 meses.

Una vez realizado el tratamiento indicado, corregidas las alteraciones de posición dental y la estimulación de un correcto tamaño de los maxilares se deben continuar controles cada 6 meses para que los objetivos del tratamiento logrados sean permanentes a largo plazo.

Durante el tiempo de dentición mixta (Intercambio de los dientes de leche por diente permanentes), el paciente debe ser valorado por el especialista para monitorear y determinar si esta nueva condición clínica oral podría generar un apiñamiento dental realizando controles periódicos.

Siguiendo las recomendaciones anteriormente descritas, tendremos la seguridad y tranquilidad de ver mejorada la calidad de vida de nuestros hijos.